-Dices eso, pero no siquiera recordabas el día que nos acostamos, así que...
-Claro que lo recordaba.
-¿Sí?
-Sí.
-Las mujeres fingen con cosas así
-¿Sí?
-¿Qué iba a decir? ¿Que recordaba el vino en el parque... y a nosotros?
-Está bien, ¿sabes qué? yo sólo estoy feliz de verte. Incluso si te has convertido en una activista maniático depresiva... todavía me gustas, todavía disfruto estar contigo.
-Siempre actuó como como si estuviera desprendida, pero por dentro me muero. me muero porque estoy entumecida.
-¿Yú crees que eres la que se muere por dentro? Cuando yo no quiero ser una de esas personas que se divorcia a los 52 y nada en las lágrimas admitiendo que nunca amó a su esposa... y que siente que su vida ha sido absorvida por una aspiradora. Quiero una vida estupenda. Quiero que ella tenga una vida estupenda. Ella se lo merece. Pero solo estamos viviendo fingiendo ser un matrimonio responsable... con todas esas ideas de como debe vivir la gente pero entonces yo... tengo esos sueños ...¿Qué sueños? tengo unos sueños en que... estoy parado en una plataforma y tú pasas en un tren, y tú pasas, y tú pasas, y tú pasas y tú pasas. y me despierto. Y mi esposa me mira y me siento a kilometros de ella y sé que algo está mal, que yo.. que, no puedo seguir viviendo así que debe haber algo más para armar que el compromiso. y entonces pienso que tal vez me di por vencido con toda la idea del amor romántico. Que tal vez la abondoné ese día cuando tú no llegaste.